La soledad solo existe si no hay paz en tu interior.
Hace minutos nada mas acabo de terminar de ver la película "El diario de Ana Frank". De tan solo recordarla escribo estos párrafos con angustia.
Una familia judía, quienes vivieron 2 años encerrados junto a otra familia que querian exactamente lo mismo que ellos, salvarse de la Segunda Guerra Mundial.
Veía la desesperación de esa familia, el encierro, el dolor y el miedo. Y así me sentía yo, no me movía porque me sentía en su misma situación. Por un momento me dió pánico moverme. Sí, es una película. Pero fue una historia verdadera. Dura, cruel y sobre todo injusta.
Gracias a Dios y mis agradecimientos hacia él son eternas, no tuve que vivir la vida que le tocó vivir a Anna.
No soy de ver peliculas Nazi. Al contrario, las detesto. Pero Youtube me la recomendó cuando entre a la página y si bien al principio me negué a verla, lo pensé y tenía que verla. Y fue por algo. Fue para dejarme una enseñanza mas en mi vida.
Esta película me llegó de una manera inexplicable. Sentí cosas muy fuertes con cada minuto que pasaba. 2 horas y media duró. Me quedé muda. Quieta. Sin saber que hacer.
Esta historia contada y tan bien realizada, me demostró que la soledad solo existe si no hay paz en el interior de cada uno. Al no tener paz, todo se convierte en agonía, desesperación, violencia, GUERRA.
La familia Frank vivía en un clima de dolor y de temor permanente. Dormian con lagrímas en los ojos. Tiritaban de miedo. Morían de frío.Pasaban hambre. Y todo, por salvar lo único que tenían, su vida.
Ellos sabían su triste final, pero a pesar de todo, se mantenian ergidos y con la frente en alto, viviendo con su dia a dia, como si no existiese nada malo alrededor.
Hoy en día, en la actualidad, en este 2014 que se termina, pasaron un monton de cosas. Cosas que no nos llevaron a nada.
Lo mismo que vivieron los Frank, pasa hoy frente a nuestras narices sin necesidad de un bombardeo.
Sin necesidad de sobrevivir teniendonos que encerrarnos por 2 años para no ser descubiertos.
Hoy la paz no existe. Dejo de existir por mucho tiempo.
El miedo ¿Acaso se fue?
¿Necesitamos que nos arrojen bombas para darnos cuenta de lo que pasa a nuestro alrededor?
El mundo, no lo podemos cambiar. Lamentablemente no.
Pero de algo estoy muy segura y es de que todos, absolutamente todos, somos un fueguito de luz que alumbra el camino si queremos encendernos.
Algunos brillan mas, otros menos. Pero la intensidad es la misma.
Iluminar el camino si nos ponemos a pensar, no es tan difícil. Es cuestión de ponerlo en práctica.
Practiquemos la paz.
Al menos empecemos por la paz interior. Dar un beso, un abrazo, llamar por telefono a alguien que realmente te necesita, ayudar al prójimo. Sobre todo ayudar con lo que uno tenga, con lo que uno pueda, pero ayudar.
Dejemos de vivir en ese pánico aterrador que esta fuera. Seamos valientes y cambiemoslo por calma.
Estemos alerta.
Estar alerta no significa vernos a nosotros mismos para cuidarnos de lo que nos puede llegar a pasar. El estar alerta no es enceguecerse en uno mismo.
El estar alerta, es el ver al otro. Ver lo que le pasa. Lo que siente. Lo que necesita.
Estar alerta, es ver lo que hay a tu alrededor y querer cambiarlo. Hacerlo mejor.
No hay paz, si no hay AMOR.
Una familia judía, quienes vivieron 2 años encerrados junto a otra familia que querian exactamente lo mismo que ellos, salvarse de la Segunda Guerra Mundial.
Veía la desesperación de esa familia, el encierro, el dolor y el miedo. Y así me sentía yo, no me movía porque me sentía en su misma situación. Por un momento me dió pánico moverme. Sí, es una película. Pero fue una historia verdadera. Dura, cruel y sobre todo injusta.
Gracias a Dios y mis agradecimientos hacia él son eternas, no tuve que vivir la vida que le tocó vivir a Anna.
No soy de ver peliculas Nazi. Al contrario, las detesto. Pero Youtube me la recomendó cuando entre a la página y si bien al principio me negué a verla, lo pensé y tenía que verla. Y fue por algo. Fue para dejarme una enseñanza mas en mi vida.
Esta película me llegó de una manera inexplicable. Sentí cosas muy fuertes con cada minuto que pasaba. 2 horas y media duró. Me quedé muda. Quieta. Sin saber que hacer.
Esta historia contada y tan bien realizada, me demostró que la soledad solo existe si no hay paz en el interior de cada uno. Al no tener paz, todo se convierte en agonía, desesperación, violencia, GUERRA.
La familia Frank vivía en un clima de dolor y de temor permanente. Dormian con lagrímas en los ojos. Tiritaban de miedo. Morían de frío.Pasaban hambre. Y todo, por salvar lo único que tenían, su vida.
Ellos sabían su triste final, pero a pesar de todo, se mantenian ergidos y con la frente en alto, viviendo con su dia a dia, como si no existiese nada malo alrededor.
Hoy en día, en la actualidad, en este 2014 que se termina, pasaron un monton de cosas. Cosas que no nos llevaron a nada.
Lo mismo que vivieron los Frank, pasa hoy frente a nuestras narices sin necesidad de un bombardeo.
Sin necesidad de sobrevivir teniendonos que encerrarnos por 2 años para no ser descubiertos.
Hoy la paz no existe. Dejo de existir por mucho tiempo.
El miedo ¿Acaso se fue?
¿Necesitamos que nos arrojen bombas para darnos cuenta de lo que pasa a nuestro alrededor?
El mundo, no lo podemos cambiar. Lamentablemente no.
Pero de algo estoy muy segura y es de que todos, absolutamente todos, somos un fueguito de luz que alumbra el camino si queremos encendernos.
Algunos brillan mas, otros menos. Pero la intensidad es la misma.
Iluminar el camino si nos ponemos a pensar, no es tan difícil. Es cuestión de ponerlo en práctica.
Practiquemos la paz.
Al menos empecemos por la paz interior. Dar un beso, un abrazo, llamar por telefono a alguien que realmente te necesita, ayudar al prójimo. Sobre todo ayudar con lo que uno tenga, con lo que uno pueda, pero ayudar.
Dejemos de vivir en ese pánico aterrador que esta fuera. Seamos valientes y cambiemoslo por calma.
Estemos alerta.
Estar alerta no significa vernos a nosotros mismos para cuidarnos de lo que nos puede llegar a pasar. El estar alerta no es enceguecerse en uno mismo.
El estar alerta, es el ver al otro. Ver lo que le pasa. Lo que siente. Lo que necesita.
Estar alerta, es ver lo que hay a tu alrededor y querer cambiarlo. Hacerlo mejor.
No hay paz, si no hay AMOR.
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